Reseña: Hacia el abismo de Carlos Trujillo

Muchos relatos de Carlos Trujillo forman una unificación donde el amor lleva a la muerte, a veces del mismo narrador, por no ser correspondido, por tener una mentalidad fuera de lo común, por un exceso de sensibilidad (arte e insania se conjugan, muchos de los personajes del autor son artistas incomprendidos). Estas palabras vienen a colación a propósito de la nueva entrega de Carlos Trujillo, «Hacia el abismo» (2020), un conjunto de cuatro relatos, tres de ellos largos y uno corto, apropiadamente divididos por capítulos, lo cual hace dinámicas las narraciones.

Carlos Enrique Saldívar

Puntuación: 3 de 5.

Escribe: Lessy Galván

Explorar los relatos de un autor significa insertarse en su mundo, en su propio cosmos. Y cuando un lector decide comenzar un nuevo libro, le espera un mundo incierto: descubre tesoros o experimenta alguna desazón. Ese es el juego. A veces se pierde, otras se gana.

¿Qué puedes esperar de «Hacia el abismo»? Conocerás un conjunto de cuatro historias largas con inicios cotidianos, pero con finales algo tenebrosos. Te toparás con personajes problemáticos que tienen que luchar contra sus fantasmas personales: la violencia que se arrastra desde la niñez, aquella locura incontrolable, algunas pesadillas que no dejan vivir y ciertas ansiedades que llevan a la propia muerte. Los relatos son los siguientes:

  • Hacia el abismo: Un hombre llamado Hans entra a una taberna de mala reputación. Al ver que una jovencita está siendo prostituida decide raptarla y emprende la huida. Una temible persecución, casi cinematográfica, se pone en marcha: el proxeneta y compañía van a su caza, mientras que la policía también busca su cabeza. Pero la muchacha no tiene ni idea de lo que está dispuesto hacer su nuevo captor con tal de salvarla.
  • Campamento maldito: Un cuarteto de chicos salen de campamento para desconectarse de su agitada vida citadina. Luego de encontrar un buen refugio, cada pareja aprovecha la noche para poder intimar. Todo parece tranquilo hasta que un par de desquiciados asesinos los encuentran. Sus vidas dependen de un hilo, mas un extraño aparece y los confronta. Los supervivientes quieren agradecerle, pero el tipo desaparece y una bestia comienza a hostigarlos.
  • Retrato del niño llorando: ¿Recuerdas aquel creepypasta del cuadro de un niño que cobraba vida? Este es un cuento que revive aquella leyenda urbana. Eduard hereda un peculiar lienzo donde un pequeño aparece llorando. Es una imagen enigmática y aterradora. Él la conoce muy bien: desde que era infante la observaba con detenimiento. No obstante, ya siendo adulto no ha podido deshacerse de aquella fatal atracción… Las pesadillas lo comienzan a embargar y el peligro se vuelve realidad.
  • Muerte al anochecer: El protagonista inicia un recorrido nocturno sin rumbo. Pasea en autobús, deambula entre delincuentes y meretrices hasta que percibe que alguien lo sigue. Trata de escapar, pero el tiempo transcurre hasta hallarse solo en medio de la ciudad. Buscando ayuda, distingue unas extrañas figuras, ¡de otro mundo! ¿Se trata de una pesadilla? No tiene idea qué es lo que ocurre ni cómo terminará esta inesperada persecución.

Las historias tienen temáticas ideales para el género. De ello no hay duda. Sin embargo, el desarrollo de ellas se queda a medias tintas. En el aspecto narrativo, los relatos decaen a causa de sobre explicaciones redundantes, repetición de algunas frases y oraciones extensas (seguidas unas detrás de otras). Esto último origina que la concentración del lector no sea perenne porque la lectura sea vuelve abrupta. Además, los diálogos no siempre resultan ser funcionales para el relato. En algunas historias se implementan con acierto: reflejan personalidad y aportan al tratamiento ficcional. Pero en otras, repiten lo que se comenta como acción.

Podría decir que esta vez «perdí», haciendo alusión a la introducción de este texto. Pero me quedo con lo mejor del libro: el ritmo, gracias al ordenamiento de los capítulos y, consecuentemente, de los hechos. El autor enumera cada sección de la historia y ninguna tiene extensión mayor que dos páginas. Esto balancea aquellas partes donde la narración se trunca. Del mismo modo, hay que resaltar que en el último cuento, Muerte al anochecer, Trujillo hace buen uso de la poesía como recurso para extender la historia -añade un epílogo- y nos muestra que es un género que domina. Son cinco páginas que agregan vitalidad y emoción (desbocada a causa del sufrimiento del protagonista).

Asimismo, debo agregar que anteriormente ya he leído al autor a través de su primera antología de terror: «Susurros en la oscuridad», cuyo tema central es el terror psicológico. Allí muestra microrrelatos y cuentos cortos, pero con un desarrollo más cuidadoso que en este último título. Por ello, me atrevería a decir que el autor maneja mejor la brevedad del cuento, antes que los relatos extensos.

Sobre las características físicas del libro, se debe saber que es de tapa blanda con solapas, el papel empleado es de avena y la tipografía es mediana. Destaca un pequeño detalle: los títulos de cada cuento tienen estilo gótico, acorde al tema del libro.

Resumiendo, «Hacia el abismo» es un libro de cuentos donde los protagonistas necesitan de la aventura para escapar, para sobrevivir. Tienen que enfrentar miedos del pasado, fantasmas que regresan. Pero también deben hacer frente a extrañas criaturas que se presentan en el camino, que atacan a modo de castigo. Si estás buscando entretenerte un rato bajo historias misteriosas, adelante.


  • Familia: Antología
  • Autor: Carlos Trujillo Ángeles
  • ISBN: 978-612-48355-0-6 
  • Edición: Primera edición. Octubre, 2020
  • Editorial: Apogeo Editorial
  • Sello: Post Mortem
  • Año: 2020
  • Páginas: 115 págs.
  • Formato: 21 x 14 cm

*Si ya lo leíste, comenta tu apreciación sobre este libro. Si no, ¡te invito a que lo leas!*

Un pensamiento en “Reseña: Hacia el abismo de Carlos Trujillo

Replica a Carlos Trujillo Cancelar la respuesta